
Hay tantos miedos, tantas dudas, tantas interrogantes que invaden, asedian, irrumpen, controlan... preocupan.
Son pocos los lugares donde huir... a pesar que ya no quiero seguir huyendo, ya no quiero seguir escabulléndome y asumir que esto también me hará daño, que me recluirá una vez más al ostracismo de mi soledad, de mi tristeza, de mi dolor.
Le peur, se convirtió en mi constante compañía... sobretodo antes de dormir. Quisiera que todo fuera más fácil, que mi mente no se empeñara a llevarme a estas cavilaciones, que mis ideas volaran hacia otra parte, que el tiempo lo pudiera manejar a mi voluntad, a mi mezquina voluntad.
No hay mañana, no lo hay, no hay un más adelante, no hay futuro, no lo hay.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario